Rara es la fecha en que no aparecen noticias acerca del negocio de las revistas con índice de impacto, donde publicar (a precios prohibitivos) aunque sean mentiras o invenciones, te abre la puerta de reconocimientos, ascensos profesionales, y sobre todo prestigio entre la comunidad científica. Poco a poco hemos conocido casos de firmantes con cientos de trabajos anuales, otros que cobran por publicar en instituciones donde no trabajan, regalos de coautorías, múltiples autocitas, o carreras completas basadas en la mentira, etc.
Como viejo profesor siempre he mantenido (habitualmente en solitario) que un trabajo no es únicamente bueno sólo por el lugar donde se publica, y el índice de impacto que alcanza por ello, sino por su contenido, aunque evaluar la producción científica de alguien leyendo y criticando todas sus aportaciones conlleva más trabajo, esfuerzo y tiempo que sumar coeficientes, cuartiles y percentiles. Los resultados ya los estamos viendo en nuestras facultades, extendiéndose la plaga de clínicos que nunca han practicado la clínica, docentes que no saben preparar temas docentes y menos aún explicarlos, o exigiendo conocimientos que, por ser de alta especialización, no deberían impartirse en el pregrado y mucho menos servir como material de exámenes ya que difícilmente servirán para el trabajo diario.
A propósito de cañonazos remito la información que me ha llegado del Servicio de Bibliotecas de la UEx, que sigue desvelando aspectos de esta sinrazón, para que los irredentos se vayan enterando.
Revistas expulsadas de Web of Science en 2023
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Esperemos que poco apoco vaya dándose cuenta el personal de que muchas de esas revistas “científicas” son una estafa que han contribuido a su desarrollo entidades como la ANECA
my de acuerdo con lo manifestado por el dr, aparicio´
esto se puede resumir en las CANTIDAD DE CARADURAS Y BUÑUELOS DE VIENTO Y YO ME CARCAJEO DEL ÍNDICEH EN MUCHOS CASOS UNA TOMADURA DE PELO.
CONOCEMOS A CARADURAS CON MAS DE 300ARTÍCULOS EN LOS QUE NO HAN TRAAJADO NADA DE NADANADA DE NADA.
SALUDOS CORDIALES
DR, CAPARRÓS