Estimados Amigos de la Historia de la Veterinaria.
Otros doce meses más. Es sólo una construcción mental, inasible, etérea, un constructo, pero hay que ver cómo van pesando los doce meses, cada doce meses, cada doce meses….. El caso es que aquí seguimos. No se nos han pasado las ganas de seguir con nuestra página web, infatigable en su labor de ser un punto de contacto, un lugar de reunión, una pequeña aldea de irreductibles hispanos con ganas de hacer, bien, la historia de la veterinaria por nuestra cuenta, independientemente del pseudopoder establecido. Viva y pujante, fuera de concurso, y con la que cuentan quienes desean saber más, abierta a todos, interdisciplinar, incluso necesaria y dificilmente prescindible ¿Será por adjetivos?
Bien, pues llegados de nuevo a este punto concreto de cronología circular y repetitiva, la Navidad, parece adecuado transmitiros una felicitación por las señaladas fechas y lo que implican, además de enviaros a todos los mejores deseos para el próximo ciclo de doce meses. Procuraremos seguir con idéntico gusto en esta tarea autoimpuesta de desarrollar y mantener esta página web, que es la vuestra. Y quien quiera jugar con nosotros que no se corte.
Por todo ello os franqueamos la puerta de nuestra casa, adornada para la ocasión, como podéis ver en la imagen, que reza “Meu Lar”, mi hogar (es mi castillo ya no cabía).
Pasadlo lo mejor posible. Debería ser obligatorio.
Feliz e histórico año 2018, Cinta y Miguel Ángel.
Por supuesto, extensivo a todos los Amigos.