En la página web de la Real Academia de Ciencias de Zaragoza leemos, con retraso, que hace poco ha celebrado su Centenario (1916-2016). Y aunque perdida la oportunidad de asistir a los actos programados, la buena noticia es que podemos descargar el libro del centenario en este ENLACE.
El libro, de amena lectura, recoge la vida de la Academia desde su fundación, sus diferentes secciones y sus miembros desde inicios del siglo XX, cuando la Universidad de Zaragoza tenía cuatro facultades: Derecho, Filosofía y Letras, Medicina y Ciencias; las dos primeras en la sede de la plaza de la Magdalena, a escasos metros de la que fue primera sede (de 1848 a 1853) de la Escuela de Veterinaria.
Se detallan los académicos fundadores entre los que se encuentra “el jesuita Longinos Navás, profesor del colegio de su orden y biólogo reconocidísimo a nivel internacional” (y antepasado mío, añado) sobre quien ya hemos tratado anteriormente en esta web, los preparativos y las dificultades de los primeros años, sus actividades, revista, los diferentes altibajos…
Entre sus académicos numerarios ha contado y cuenta con veterinarios, todos ellos profesores de la Facultad de Veterinaria y adscritos a la sección de Naturales. El primero fue D. Jesús Sainz y Sainz-Pardo que ingresó en 1951; le siguió D. Ángel Sánchez Franco en 1966. A ambos recordamos con cariño, pues formaron parte como profesores de nuestra estupenda y ya lejana etapa universitaria. Pudo haber más representación veterinaria ya que se nombró en 1976 a otros profesores, pero no llegaron a formalizar su ingreso.
Actualmente la Facultad de Veterinaria está representada por dos profesoras bien conocidas también por nuestra promoción: Caridad Sánchez Acedo y M. Victoria Arruga Laviña, bióloga esta última aunque ha desarrollado su actividad profesional en la Facultad de Veterinaria.
Comprobamos con agrado que nuestra profesión también forma parte de la historia de la Real Academia de Ciencias de Zaragoza.