No, no se trata de un chiste fácil.
El caso es que a través de Hiperallergic del pasado día 19, Allison Meier ha publicado una curiosa noticia que viene a abundar (creo yo) en esa polémica de la utilización de cadáveres de animales como forma de arte. Se trata ahora de una representación gráfica, lo que sin duda no es lo mismo.
En la Gran Bretaña victoriana de los años 80 del siglo XIX era costumbre enviar felicitaciones de Navidad con el dibujo de un pájaro muerto sobre la nieve, cuyo significado, lejos de macabras intenciones, era el de mostrar las historias victorianas (recordemos a Dickens) de niños muertos de frío sobre la nieve, es decir, la presencia constante de la muerte en la vida cotidiana. De esta manera, el pajarito muerto parece indicar que se nos desea buena suerte para el año que entra. Y se basan para ello en un ritual de caza de pajaritos el 26 de diciembre, que indica que si cazas un reyezuelo o un petirrojo, vas a tener suerte.