Nuestro amigo el Dr. Caparrós, infatigable en su empeño de construir un diccionario de términos antiguos de la veterinaria española, lejos de disminuir su actividad como consecuencia de los calores veraniegos, sigue a ritmo constante e inasequible al desaliento, buscando en los lugares más recónditos muestras de los términos utilizados en los textos clásicos de la albeitería y veterinaria hispanas.
En esta ÚLTIMA VERSIÖN, que se halla depositada en su biblioteca (ver: amigos) se ha dedicado a incorporar (entre otras cosas) términos aragoneses recogidos en diccionarios de fabla. De esta manera os recomiendo que si disponéis de diccionarios de lenguas locales (o de idiomas, como queráis… ) se los hagáis llegar al autor. Doy fe de que devuelve los libros, y también de que una vez su libro sea publicado, aún en su primera edición, muchos daremos gracias a los dioses por su trabajo. Y muchos otros reconocerán, entonces, su trabajo, su esfuerzo y su utilidad.
Gracias amigo Caparrós.
Apreciado Dr. Vives:
Me he ruborizado por sus cariñosas y amables palabras.
Sin la ayuda de varios compañeros la empresa sería mucho más difícil.
Era mi intención llegar a las 2000 entradas al finalizar el año y creo que no lo conseguiré a pesar de las ayudas que recibo.
Con todo, intentaré no defraudar a los amigos de la historia.
Un abrazo.
Dr. Caparrós
Dr. Caparrós.
¿Quiere hacernos creer que a estas alturas siente usted rubores, y acaso picazones y desasosiegos varios?.
Pues yo que me preparo afanoso para la jubilación, creía firmemente que esos escozores desaparecían con la edad…..
En fin, vivir para experimentar.